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Un poco de historia
La vida de la Ing. Johanna Briceño Cárdenas se resume en
un liderazgo innato que empezó a erigir desde niña y que
se edificó en su etapa como profesional.
“Crecí en un matriarcado; éramos mi abuela, mi tía, mis
dos hermanas y mi mamá, que era la que salía a trabajar.
Desde pequeña asumí la batuta de la casa, por ejemplo mi
mamá me dejaba la tarjeta y yo hacía todos los pagos y las
compras… todavía hoy a mis 32 años, mis hermanas me
siguen viendo como una líder”, relata esta guanacasteca.
Esa autoridad que empezó a adoptar desde sus primeros
años de vida la fueron preparando para los retos profesio-
nales que la recibieron de grande.
Gracias a sus habilidades para la toma de decisiones, su
liderazgo no se limitó a las cuatro paredes de su casa, sino
que traspasó la comunidad y a su ámbito profesional.
Con maleta en mano y dejando atrás la pampa guanacas-
teca, viajó a San José para ingresar a la Facultad de Inge-
niería Topográfica de la Universidad de Costa Rica (UCR)
con la esperanza de pasarse a Arquitectura; sin embargo,
el trabajo de campo propio de la carrera y la amplitud pro-
fesional la conquistaron.
Su vida universitaria la equilibró con el ejercicio profesio-
nal en el Colegio de Ingenieros Topógrafos (CIT), donde
empezó sus andanzas como Secretaria. Una vez concluido
el Bachillerato en Ingeniería Topográfica, escaló de posi-
ción y empezó a trabajar como Inspectora en el CIT, don-
de, durante cuatro años, tuvo como responsabilidad el
Centro de Actualización Profesional (CAP).
En el 2009, regresó a su tierra natal, Guanacaste, donde
aprovechó un puesto en la Municipalidad de Nicoya como
Asistente de Ingeniería. Desde el 2012, ejerce como Perito
Topógrafa en el ayuntamiento. Ahí empezó a involucrarse en
diferentes comisiones de trabajo que le permitieron tener un
contacto directo con distintas personas y conocer las nece-
sidades locales.
“Guanacaste se enfrenta a muchos retos atenientes al Catas-
tro y Registro: la actualización del Mapa Catastral, el cum-
plimiento de la Ley de Bienes Inmuebles (para que la gente
declare realmente lo que corresponde), lograr que la muni-
cipalidad perciba los ingresos que le permiten desarrollar y
potenciar la provincia”, comenta Briceño.
Aporte local
Aprovechando su trabajo en Nicoya y sus deseos de servir
a la comunidad, Johanna Briceño decidió continuar ligada
al CIT de alguna manera. Por lo anterior, decidió integrar-
se a la Asociación de Topógrafos de Guanacaste (ASOTO-
PGUA), de la cual es Presidenta actualmente.
“El CIT quería descentralizarse y atender las necesidades
de los profesionales de la provincia de Guanacaste, por
lo que se decidió activar una asociación allá en el 2011.
Desde esa fecha he participado activamente y me llena de
orgullo sentir que confían en mí y que de alguna manera
aporto a los colegas de mi tierra”.
La ASOTOPGUA cuenta con 35 miembros, de los cuales
participan activamente entre 20 a 25 profesionales.
Como reto local, la Ing. Briceño explicó que se está consi-
derando activar una asociación adicional en Guanacaste
debido a las distancias entre cantones y la cantidad de
profesionales en la zona.
La Ing. Johanna Briceño Cárdenas continuará trabajando
para el crecimiento de sus colegas coterráneos y desde su
puesto como Fiscal en el CIT, espera seguir aportando al
gremio en general.
TOPOMUJER
- Revista Azimuth 28: 22-23, ISSN: 1659-2948 / 2015
