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editorial
Revista Azimuth 33: 5-6 ISSN: 1659-2948 / 2017
Al finalizar este año, podemos hacer un análisis de los retos y logros del
Colegio de Ingenieros Topógrafos (CIT), porque cuando acepté ser presen-
tado para ocupar el puesto de la Presidencia del CIT, fue una decisión com-
pletamente meditada y conocedor de las tareas y responsabilidades que el
puesto de presidente conlleva y hemos puesto lo mejor de nuestra parte,
la Junta Directiva como el personal administrativo del CIT y estamos con-
vencidos de los logros que se han venido alcanzando y de la necesidad de
poder seguir creciendo.
Para los profesionales que ejercen la agrimensura, hemos visto como día a
día se presentan labores más complejas, requisitos que muchos de los cuales
hemos considerado que no deben de solicitarse y es allí en donde nos hemos
querido enfocar en primera instancia, sin que esto signifique dejar de lado
todas las otras especialidades del perfil profesional del ingeniero Topógrafo.
Los procesos de capacitación son relevantes, hemos incrementado muy
significativamente la participación de nuestros agremiados en los mis-
mos y de nuevos cursos de actualización, esto nos llena de satisfacción
y reafirma el compromiso de seguir adelante.
Seguimos día a día la tramitación digital de planos por medio de la plataforma del APT del CFIA y del SIP del Registro
Nacional; hemos propuesto una serie de mejoras tanto para el CFIA como para el Registro Nacional, en procura de
optimizar el uso de esta herramienta informática.
Hemos iniciado desde hace ya algunos meses, la preparación de nuestro quinceavo congreso, acto solemne de capa-
citación de los profesionales miembros del CIT y también hemos mejorado mucho las relaciones con otros colegios
profesionales y asociaciones, tanto nacionales como internacionales, utilizando al máximo la tecnología para realizar
reuniones virtuales, acción que deviene en un ahorro en el tema financiero.
El CIT ha demostrado una política de sana administración, de aprovechamiento máximo del presupuesto que refleja
una situación financiera muy positiva, lo cual permite la consecución de proyectos de relevancia para el gremio y eso
lo ratificó los resultados del auditoria externa realizada para el período 2015-2016, en donde indica también que las
Juntas Directivas anteriores realizaron una buena labor con transparencia y que nos compromete a nosotros seguir
en esa misma línea para entregarle a las Juntas Directivas futuras, un CIT más consolidado y estable.
A nivel internacional, seguimos dejando huella, ya que en el mes de octubre se logró obtener nuevamente la presiden-
cia de la Asociación Panamericana de Profesionales de la Agrimensura y Topografía (APPAT), organización de carácter
internacional conformada actualmente por 12 países, incluyendo Costa Rica y es una vitrina que ha incrementado la
credibilidad de nuestro quehacer y a través de la cual construimos lazos de amistad y crecimiento profesional con los
colegios que la integran y viene a contribuir con lo que indica la visión del CIT que dice: “Para el año 2018, el CIT y sus
profesionales deben estar posicionados como los rectores de la topografía en Costa Rica y como los principales referen-
tes en América Latina, alineados con las tecnologías geoespaciales de última generación y con el desarrollo sostenible.”
Steven Oreamuno Herra
Presidente del Colegio de
Ingenieros Topógrafos de Costa Rica
Presidente del Colegio Federado de
Ingenieros y de Arquitectos